El recorrido es la experiencia
Abigail era una mujer tan hermosa que, por donde pasaba, todos quedaban admirados. Su brillante cabellera color caramelo hacía juego con sus ojos almendrados y su caminar cadencioso.
Romualdo, uno de sus grandes admiradores, era guapo, fuerte y atlético; sin embargo, a pesar de sus grandes cualidades y esfuerzos, no lograba que ella se fijara en él. Decidido a lograrlo, colocó carteles anunciando que se batiría en duelo con una legendaria bestia a la que todos temían y que, con frecuencia, merodeaba las cercanías del pueblo.
Durante el crudo, descarnado y mortal combate, Romualdo buscaba con su mirada a Abigail entre los exaltados asistentes, pero ella, para su desconsuelo, no estaba. Llegó el momento crucial que, después de un grito lastimero, selló las gargantas de los presentes; Romualdo, exhausto y ensangrentado, caía muerto mientras la bestia, mal herida, desaparecía en una rápida carrera.
Ya lejos de allí, la bestia se restañaba las heridas mientras poco a poco, la brillante cabellera color caramelo, le iba cayendo sobre los hombros.
Ana María Rotundo
19 de octubre de 2023.